Vaya por delante que el personal de oficina, el de almacén, y los transportistas ofrecen un servicio de lo más efectivo. En ese aspecto podemos decir que la satisfacción es grande y que además existe una muy buena relación. Claro que si no fuera por ellos, la delegación de Pontevedra hace tiempo que hubiera reventado.
Hacemos esta aclaración porque el problema aparece cuando es el delegado el que atiende el teléfono. Lo resumimos en tres puntos.
1.- Creemos que existe alguna avería ya que el fax salta con demasiada frecuencia o la señal de comunicando es muy constante. Eso añadido a que es frecuente que el delegado ordene no coger el teléfono. Incluso sin ningún pudor, lo hace delante de los estanqueros.
2.-Cuando es el delegado el que coge el teléfono, sabemos que tardará en tomar nota y que la probabilidad de incidencias es grande. Sus errores son constantes.
3.-Ojo con esta frase: “llama dentro de 10 minutos”. Es muy habitual, no tiene ningún reparo en dejarnos con la palabra en la boca, tras la frase cuelga y se queda tan ancho.
Es evidente que si nosotros hiciéramos eso con nuestros clientes, el negocio no duraría ni dos días.
Todo esto lo podríamos tomar con humor, pero nos afecta negativamente en nuestra labor profesional. Se trata del teléfono de la Delegación de Logista de Pontevedra, aunque más bien parece “el teléfono de la risa”.
Es verdad que esto pasa pero casi siempre por las tardes, la forma de contestar y la mala educación es lo que no se puede permitir.
ResponderEliminarlo mejor es lo que hacemos todos cuando coje cudeiro colgamos el telefono
ResponderEliminarPero que coño tiene ese individuo para que todos aguanten sus abusos,lo peor es para la compañia si supiera lo que pierde de vender si que lo largaba, logista dis en la provincia no vende ni la mitad de lo que tendria que vender. Hay es donde tenemos que hacer incapie, que les duelA EL BOLSILLO.
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